con un jarro de agua fría.
No sé si es miedo o precaución,
o tu forma de ser, o la mía.
Y luego un beso, una sonrisa,
que me desarman de nuevo.
Y vuelo, siempre vuelvo.
Callando, otra vez calmada,
no diciendo porque no puedo.
Y yo no soy para tí,
Porque tú no quieres verlo.
Ni quieres dejarme decir,
ni quieres dejarme sentir,
ni quieres dejarme por si sí,
ni quieres decirme por si no.
Y yo no soy para tí,
Porque no puedo cambiar.
Nunca guardo nada dentro
y me envenena este silencio.
Porque esto no se decide,
ni la intensidad, ni el momento,
pero hay que tener valor
para aceptarlo y yo lo tengo.
Falta saber si tú
estás dispuesto a tenerlo.
Entonces podremos hablar
de si encaja o no todo esto,
porque habrá algo que intentar,
para saber si será o no nuestro.
Y quizás tú no seas para mí,
quizás por falta de costumbre,
quizás por falta de ganas,
quizás por miedo a sentir,
Seguramente porque no das la talla.
Pero no quiero quedarme
con la duda.
Responde a las pregunta:
¿Cómo se llama esto?
Porque me estoy enamorando
y todavía estoy a tiempo.